30 – NOVIEMBRE

Matutina: Josué 24:14-21

Meridiana: Salmo 57

Vespertina: Juan 6:61-71

EL CAMINO DE DIOS ES EL MEJOR

Millares de personas se alineaban en las calles de Londres el día en que el cadáver del famoso misionero y explorador David Livingstone iba a ser enterrado en la abadía de Westminster, con los hombres famosos de la nación. Cuando pasaba el féretro, alguien observó a un anciano mendigo con todas las señales del vicio de la embriaguez en su rostro, que lloraba amargamente. Se le preguntó la razón, y respondió: “David y yo nacimos en el mismo pueblo, concurrimos a la misma escuela y trabajamos de aprendices en el mismo taller; pero David siguió un camino y yo otro. Ahora él es honrado por todo el país y yo soy un desconocido y despreciado: no tengo otra esperanza que la tumba de un borracho”.

Si llegara el día que los hombres entendieran que para vivir no hace falta usar ninguna clase de vicio, ¡cuántas lágrimas serían enjugadas! ¡Gloria a Dios! porque por la misericordia de Dios nosotros, como David Livingstone, escogimos el camino de Dios, donde disfrutamos de grandes bendiciones y tenemos la esperanza dulce de la salvación. ¡En los momentos de pruebas, luchas y tentaciones, no pensemos en el mundo como la solución, recordemos que el camino de Dios es el mejor!

-María R. Arias

Sigamos el camino recto hasta llegar al final.