Corría el año 1994 de la pasada centuria, en medio de una etapa conocida por los cubanos como “Periodo Especial”, comenzaba la limpieza del terreno y se realizaban las primeras labores constructivas. Tras una afortunada transacción, la iglesia había adquirido una parcela de terreno en el residencial Reparto Flores, en el costero municipio de Playa. En ese mismo año, bajo la supervisión del hermano Isaí Cabrera, ejecutor de la obra, comenzaba un sueño que duraría 20 años en hacerse realidad; un regalo del Señor, quien utilizó
En sus diferentes etapas, más de un centenar de obreros aportaron tiempo y esfuerzo en la materialización de esta labor que, en sus inicios, pretendía dotar a la Iglesia de una propiedad valiosa por su ubicación. Con un total de 8 habitaciones, el 8 de abril de 2008 fue inaugurada la Casa de Retiro para Pastores Casa Flores. Por la gracia de Dios y el esfuerzo de hombres valiosos que, de manera voluntaria, ofrecieron lo mejor de su talento a la obra del Señor, el terreno baldío dos décadas atrás, abría sus puestas a una iglesia agradecida y saludaba a la comunidad, irradiando la belleza de una obra acabada.
Cercano a su décimo segundo aniversario, y actualmente con un total de 23 habitaciones perfectamente amuebladas y con servicios de restaurante y organización de eventos, Casa Flores ha devenido eficaz ministerio de servicio de hospedaje a personas naturales y a más de una treintena de iglesias y organizaciones ministeriales. El Oasis espiritual de la calle 166 es una fuente de bendiciones a nuestra comunidad que ofrece, además, servicios de vacaciones a pastores y ministros de nuestra iglesia, y destaca en la organización de talleres y recepciones para grupos que no exceden los 40 participantes. Dentro de la gama de servicios ofrecidos por la organización se encuentran los siguientes: celebraciones de bodas, aniversarios, actividades de protocolo, reuniones.