27 – ENERO

Matutina: Salmo 125

Meridiana: Salmo 3

Vespertina: Hechos 9:36-42

FLORES EN EL JARDÍN DE DIOS

La vida puede verse como un inmenso jardín donde hay abundante variedad de flores preciosas, pero también infinidad de malezas que tratan de ahogar, poco a poco, las plantas buenas y destruir la simetría perfecta que el gran Jardinero planeó para este bello jardín llamado mundo del que tú y yo somos parte; y ahora pregúntate: ¿Seré flor preciosa o maleza destructora? De nosotros depende lo que seamos, pues Dios, al formarnos, nos dotó de libre albedrío, o, en otras palabras, nos dio la oportunidad de escoger qué vamos a ser. Puede que no seas vistosa cual las rosas, pero puedes ser humilde violeta que perfuma el pie que la destruye, y ejemplo de sencilla belleza que atrae más porque, a diferencia de las rosas, no tienen  espinas.
No importa cuál flor seas, sé flor en el jardín de Dios, perfuma, alivia, alegra,  a todos con tu primor y brinda y sé y da y existe para Dios y los que te rodean con agradable testimonio, que es mejor ser sencilla flor que malezas pretenciosas cuyo final será el fuego, mientras tú, pequeña florecita, serás recogida en el jarrón de Dios para adornar el cielo.

-Judith Stone

Perfuma con una vida bien vivida y sé flor en el jardín de Dios.